La Federación Internacional de Natación (FINA) ha confirmado este domingo que tres de los miembros de su Junta de Revisión de Dopaje (DCRB), entre ellos su presidente, Andrew Pipe, presentaron su dimisión por la participación de los deportistas rusos en los Juegos Olímpicos de Río 2016, y ha mostrado su sorpresa por un hecho que lamenta.
«A la vez que la FINA lamenta obviamente esta decisión, nuestra federación expresa su profundo aprecio y reconocimiento por su trabajo en nuestra exitosa política antidopaje durante los últimos años», señala en una nota de prensa.
En cuanto a los motivos que los tres dimisionarios expresan en su carta de renuncia, la FINA «clarifica que los Juegos Olímpicos son un acontecimiento deportivo del Comité Olímpico Internacional» (COI) y que «la decisión sobre la participación de los deportistas rusos la tomaron el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) y el COI». «La FINA respetó e implementó sus decisiones», precisa.
«En este complejo proceso, la FINA dejó clara la posición del DCRB, pero nuestra federación internacional no fue el organismo que tuvo la última palabra en ese asunto», agrega.
En cuanto a las recomendaciones técnicas expresadas por la DCRB. la FINA aclara que «siempre fueron implementadas en función de su estrategia antidopaje».
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